En las siguientes fichas se han desordenado las sílabas, ayúdate con los simpáticos dibujos para ordenarlas y escribir la palabra completa. En este ejercicio sólo trabajaremos con palabras que forman parte del vocabulario de otoño.
Los niños pequeños tienen una conciencia escasa de los sonidos del lenguaje. Oyen, perciben una secuencia continua de sonidos, pero no son conscientes de que estos se pueden dividir en palabras, (conciencia léxica), estas en sílabas (conciencia silábica), y que estas últimas pueden estar formadas por uno o varios sonidos (conciencia fonémica).
Cuando hablamos de habilidades fonológicas nos referimos a la capacidad de reflexionar sobre los sonidos de la propia lengua. Es decir, de la habilidad para pensar y manipular sobre ellos con la finalidad de adquirir conciencia de sus segmentos sonoros. La relación entre conciencia fonológica y lectoescritura es bidireccional puesto que la conciencia fonológica favorece la adquisición de la lectoescritura y su enseñanza desarrolla dicha conciencia.
La lectura y la escritura son dos habilidades que se aprenden, todos tenemos dicha capacidad. Es primordial impulsar el aprendizaje de la lectoescritura desde una edad temprana.
El abecedario es el conjunto de símbolos, normalmente denominadas letras, que se utilizan para la escritura de un lenguaje. Es común también, que a cada letra le corresponda un sonido, denominado fonema.
Los niños pequeños tienen una conciencia escasa de los sonidos del lenguaje. Oyen, perciben una secuencia continua de sonidos, pero no son conscientes de que estos se pueden dividir en palabras, (conciencia léxica), estas en sílabas (conciencia silábica), y que estas últimas pueden estar formadas por uno o varios sonidos (conciencia fonémica).