Un problema muy habitual que tenemos los padres, es la falta de comunicación por parte de nuestros hijos, sobre todo cuando nos interesa conocer aspectos relacionados con sus amigos, o con el colegio, también es fundamental conocer su estado de ánimo y cómo se sienten, sí son felices y están tristes, etc. Pero en muchas ocasiones nos encontramos con un verdadero muro, ya que ellos se guardan casi todas esas cosas para sí mismos.
En este post os ayudaremos con este problema, existen algunas técnicas y juegos pedagógicos, cuentos y diferente herramienta adaptadas según la edad, en concreto hoy os hablaremos y una de ellas que a mí me encanta y que es ideal para diferentes edades, pero muy efectiva con niños pequeños: es la técnica de «la Rosa y la Espina«, es una técnica la que no precisamos de ningún tipo de recurso solamente tiempo y amor.
Está técnica es ideal para que nuestros hijos trabajen las emociones y que sean capaces de afrontar diferentes situaciones en las que estén implicados sus sentimientos, además de favorecer la comunicación entre padres e hijos.
Lo más interesante para que esta técnica tenga éxito, sobre todo cuando hablamos de niños pequeños es afrontarla desde un punto de vista lúdico, ya que está demostrado que el juego es un vehículo fundamental para el aprendizaje y la adquisición de destrezas emocionales. La dinámica es sencilla consiste en relacionar aquellas emociones, situaciones, o sentimientos positivos con la con la rosa, y por el contrario relacionaremos con la espina situaciones, o aspectos que para nuestros hijos hayan resultado negativas.
Una idea que os proponemos desde Imágenes Educativas es utilizar esta técnica a la hora de acostarse, justo después de leerle el cuento de todas las noches, podemos empezar nosotros diciéndoles o contándoles cuáles han sido nuestras rosas y nuestras espinas del día, para favorecer que ellos sean capaces de abrirse y contarnos las suyas. Otra idea que os proponemos es que hagáis esta técnica en familia y que os implicase todos papá mamá y resto de hermanos.
La periodicidad y la constancia en la realización de esta técnica favorecerán la comunicación dentro de la familia y de esta manera propiciar que nuestros hijos sean capaces de hablar de sus sentimientos, sus emociones o de cualquier tipo de problema que hayan podido tener en su entorno escolar o social.
Si hablamos de hijos más mayores, una situación ideal para poder realizar o poner en práctica esta técnica es a la hora de comer, de la misma manera lo trataremos de forma natural y sencilla, será fundamental sobre todo en edades complicadas como pueden ser la adolescencia y la pubertad. Esta técnica además nos ayudará a:
Enseñar a expresar sentimientos y emociones.
Promover el asertividad nuestros hijos.
Favorecer la escucha activa.
Favorecer la confianza en los padres.
Hacer que nuestros hijos se sientan escuchados, atendidos y amados
Gaby dice
Muchas gracias por compartir formas de involucrarnos como Papás y en la ayuda de nuestros hijos en el aspecto emocional para así mismo conocer más de ellos favoreciendo la confianza entre Padres e Hijos.
Derlis dice
Muchas gracias son tantas las herramientas que nos dan y asi vemos que se puede y se debe trabajar ppr nuestros niños
Tania castañeda ramirez dice
Me gusta eso de Rosa y espinas pero deme un ejemplo como puedo empesar