Beneficios de la música para el cerebro y el desarrollo de los niños

Beneficios de la música para el cerebro y el desarrollo de los niños

Diversos estudios demuestran la importancia de la música como ayuda para el desarrollo intelectual , ya que genera gran cantidad de conexiones neuronales. Es el estímulo sensitivo que más zonas del cerebro activa. La audición desde recién nacidos de música, mejor si es clásica, y su desarrollo musical según van avanzando en su desarrollo, ya sea bailando, cantando  o tocando algún instrumento musical , tienen los siguientes beneficios positivos en los niños:

  • Favorece el aumento de la capacidad nemotécnica, de atención y de concentración.
  • Facilita la resolución de problemas matemáticos y de razonamiento mental complejo.
  • Promueve nuevas vías de expresión y por tanto, de canalización de las emociones.
  • Al ser una actividad a combinar con el baile u otras actividades físicas, favorece el desarrollo muscular, el control del equilibrio, la estimulación de varios sentidos a la vez, etc.
  • Es una fuente inagotable para la estimulación de la creatividad.
  • Fomenta una mejor autoestima.
  • Facilita los vínculos personales y el desarrollo de habilidades sociales.
  • Contribuye a agilizar la rapidez con la que el cerebro es capaz de procesar el habla y por tanto, ayuda a que el sistema auditivo del niño sea más eficiente.

Girls practice in the school of music. Looking at camera.

¿Cómo se produce la aproximación de los niños a la música?

Los niños desde su más tierna edad necesitan de estímulos sensoriales que contribuyan a su correcto desarrollo. En ese sentido, y considerando los beneficios expuestos anteriormente, la música es un favor clave que si no se presenta desde los primeros años puede repercutir en alteraciones a nivel psíquico o biológico, ante la carencia de estimulación que conlleva asociada.

Algunos de los hitos en el desarrollo cognitivo de los niños en su interacción con la música, en función de la edad, son:

  • Desde el nacimiento: el niño reaccionará ante cualquier estimulación sonora  modificando su estado de reposo y en determinadas situaciones haciendo movimientos en busca de la fuente sonora.
  • A partir del año: los pequeños son capaces de hacer música mediante canturreos o balbuceos. Conforme vaya creciendo estos sonidos irán incorporando el ritmo en su reproducción. Así mismo, y a nivel motor, con esta edad los niños suelen reaccionar ante la música con balanceos, inclinaciones de cabeza, giros de muñeca, elevación de brazos, etc.
  • A los dos años:  son capaces de manipular instrumentos sonoros o de generar sonidos con objetos, incluso con el fin de acompañar a melodías improvisadas.
  • De los 2 a los 3 años: se presenta una mayor coordinación psicomotriz y una respuesta rítmica más acorde con la música que escucha. A partir de esta edad, los pequeños son capaces de cantar como actividad auxiliar al juego.
  • De los 3 a los 4 años: aumenta la coordinación y la variedad de movimientos, permitiendo al pequeño simular incluso algunos pasos de danza.
  • De los 4 a los 5 años: se empieza a desarrollar la capacidad de memorización de melodías y de letras de canciones, cada vez más largas. En algunos casos, el niño será capaz de componer sus propias canciones, desarrollando de este modo su creatividad e imaginación en el ámbito musical.
  • De los 5 a los 6 años: se mejora el tono y la capacidad de canto, disponiendo de capacidad para reproducir canciones, corregirlas y memorizarlas.

¿Cómo se puede favorecer desde la educación infantil la estimulación musical?

Resulta esencial que los profesionales del ámbito educativo conozcan las diferentes etapas del desarrollo cognitivo de los niños en relación con la música. Estas van, como comentábamos con anterioridad, desde la simple repetición de ritmos a la capacidad de aprendizaje de melodías y letras de canciones.

La música como disciplina deberá tener entidad propia en el currículo educativo, cuando el alumno disponga de la capacidad cognitiva adecuada para asimilar los contenidos relacionados. En las edades más tempranas la música debe de ser el eje vertebrador del día a día de la escuela, contribuyendo así al integral desarrollo del niño, en función de su edad.

Reforzar en el entorno de casa la estimulación musical del niño, siempre será favorable. Así mismo, conforme vaya creciendo, la música puede irse sugiriendo al menor como una actividad de ocio, aprendizaje e interacción social. Descubrir el potencial de cada niño, para tocar un instrumento, cantar en una coral, practicar el baile, etc. si se estimula desde la más tierna infancia, puede ser una actividad factible con un componente de incalculable valor para su salud cognitiva y emocional.

Fuente: https://faros.hsjdbcn.org

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4 Responses

  1. ANTONIO BANDERAS GUTIERREZ dice:

    FELICIDADES SOY PROFESOR DE ENSEÑANZA MUSICAL, ME GUSTARÍA RECIBIR MAS INFORMACIÓN SOBRE EL TRABAJO CON LOS PEQUES DE EDUCACIÓN PREESCOLAR ES DECIR ALGUNAS ACTIVIDADES CON NIÑOS QUE TIENE PROBLEMAS DE CONDUCTA.

  2. MA DEL SOCORRO SALAZAR GUZMAN dice:

    Muchas gracias por la información me ha servido de mucho.

  3. Veronica dice:

    Me puedes enviar mayor información, por favor?
    Muchas gracias

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